Después de su partida, el nombre del Maestro Rafael Escalona sigue resonando con fuerza en el alma del Vallenato. Su legado no solo se escucha, se siente; vive en cada acorde, en cada verso que narra la historia y el corazón de nuestro pueblo. Desde Jardines del Eccehomo donde reposan los restos del Maestro, la familia Escalona fue acompañada por compositores, como Rafa Manjarrez, Alberto Murgas, los Reyes Vallenatos, Chemita Ramos y Almes Granados, la cantante Margarita Dorían, los talentosos niños de la Escuela de Música de la Fundación Festival de la Leyenda Vallenata, quienes, con amor y respeto, le cantaron al Maestro, interpretando aquellas canciones que alguna vez nacieron de su inspiración.

Empresarios, amigos, el medio de comunicación Que Viva el Vallenato, periodistas, se hicieron presente en este emotivo aniversario, testigos de un homenaje que no solo recuerda, sino que honra y celebra la vida de uno de los pilares más grandes de la música vallenata.
Rafael Escalona no se ha ido. Vive en su obra, en su pueblo, en la historia musical de Colombia.